Ese enero de 2002 hablamos. Toda una tarde pidiéndole perdón. Pero ya nunca sería lo mismo... él no me querrá como siempre. Estaba muy dolido aún. Yo había tardado mucho en hablar con él. Al menos, se tranquilizaron las cosas y cada vez que nos damos la paz en misa para mí es algo distinto que con otra gente.
hoy nos hemos vuelto a dar la paz, y sigo sintiendo esa misma sensación desde entonces...
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